Buda era un ser humano especial, amable, compasivo y omnisapiente. Un encuentro con èl cambiaba positivamente la vida de esa persona. Afirmaba que toda persona puede lograr el "despertar" tal cual èl lo hizo, y desarrollar su pureza mental y comprenciòn de todos los fenòmenos o entes hasta un nivel que excede por lejos a los de seres humanos comunes. Asì sucediò con varios de sus discipulos, incluidos sus màs cercanos como Sariputra.
Se dice que Buda medìa cerca del metro ochenta, bien parecido, con cabello negro y complexiòn atlètica. Al momento de renunciar y emprender la bùsqueda de la soluciòn al sufrimiento, afeitó su cabeza y vistió ropas simples al igual que los monjes de hoy. Esto sucediò cuando contaba con veinte y nueve años.
La renuncia budista es la determinaciòn del ser humano de querer ser libre del sufrimiento y de sus causas. Sufrir es el peso emocional de la condiciòn humana: es dolor, pena, frustracion, rabias, vacio, insatisfacciòn. Nuestra ignorancia de las causas es la raiz del sufrir, nos vemos por ejemplo como individualidades, que tenemos un yo al que nos aferramos y sufrimos porque realmente este no tiene existencia efectiva. No nos damos cuenta de ello ni de su implicancia.
Buda enseño un Camino Medio entre la complacencia sensual y el ascetismo estricto, por el cual deberiamos transitar para obtener el logro buscado. Necesitamos paciencia, disciplina y perseverancia para seguir ese sendero budista y lograr el despertar tal como Buda. En el trayecto, se experimentaran los sabores del avance del camino.
Buda era un orador con gran maestrìa, con su càlida voz trasmitìa sus enseñanzas (Dharma) dejando alegre, instruida e inspirada a su audiencia, quienes atenta y silenciosamente escuchaban. Predicaba: si los demàs me critican o critican el Dharma o a la Sangha (grupo de seguidores) no deberiàn por ello enojarse, resentirse o molestarse. Es un buen momento para recordar que predicaba un no a la violencia.
Diariamente al despertar, luego de dormir muy pocas horas, dedicaba tiempo de la madrugada a la meditaciòn. Caminaba como ejercicio y luego platicaba con las personas que iban a verlo. Antes del mediodia tomaba su cuenco y se dirigìa al pueblo o caserio màs cercano a mendigar alimento. Al percatarce que su cuenco contenia lo suficiente para almorzar, regresaba al lugar donde estaba vivièndo. Acostumbraba comer una sola vez al dia, antes del mediodìa. A veces las personas lo invitaban a comer algùn alimento y aceptaba y, al terminar lavaba su cuenco y ofrecìa una breve charla del Dharma.
Por las tardes conversaba con las personas que iban a verlo, les daba charlas sobre el Dharma y daba instrucciones y preparaciòn a sus monjes. Por las noches meditaba.
Buda y sus monjes recorrian los pueblos y ciudades durante nueve meses del año dando charlas y luego se establecian por los otros tres meses muy lluviosos del monzòn en las cabañas que se habian construido para ellos en Pico del Buitre o en los Bosques de Jetabana. Estos levantamientos fueron financiados por reyes de la època. En sus viajes dormia en cualquier parte, ya sea sobre la tierra y hojas de un bosque o en alguna caverna.
La combinaciòn del mensaje de una enseñanza perfecta y un insuperable maestro permitiò que el Dharma se difundiera ràpidamente por India. Años despues se difundaria a paises cercanos gracias a los viajes de monjes budistas como a los visitantes avanzados que fueron a estudiar y traducir textos originales.
Sus charlas y explicaciones no estaban exentas de humor, por ello incluyen metàforas, juegos de palabras, historias fantàsticas y algunas dosis de ironia.
El principal motivo de Buda para difundir el Dharma era la compasiòn. El evidenciò durante su despertar que los humanos estamos limitados por la codicia y los deseos, complicados con la ira y sesgados por nuestra ignorancia. El sabìa por experiencia propia, que si escucharan y practicaran el Dharma se volverìan seres felices, virtuosos, libres y sabios. Instruia que todo ser tiene en si la potencialidad o semilla de la budeidad; el era el mejor ejemplo.
Ver entrada Nalturaleza de Buda , Componentes en una figura de Buda y Buda el despierto.
K Dondrup T.
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